martes, 20 de agosto de 2019

Hablemos de Cine: Canino [Crítica - Recomendación]

Lo voy a seguir repitiendo hasta que me aburra. El cine no es únicamente Hollywood, y no todo el cine viene de EEUU y el UK. Tanto Latinoamérica, como Asia y Europa tienen muy buenos directores y muy buenas películas. Con tramas originales y con mensajes profundos. Nuevamente, mis dos amigos cinéfilos, cada uno por su cuenta y sin saber qué hacía el otro, Joako y Zero, me recomendaron esta película. Esta crítica la publiqué en mi cuenta de Facebook en mayo de este año (2019), al día siguiente de ver este film, dirigida por un griego, con actores griegos y hablada en griego.

Título: Kynódontas (en griego Κυνόδοντας)
Canino, en español; Dogtooth en inglés.
Año: 2009.
País: Grecia.
Dirigida por: Yorgos Lanthimos.
Productoras: Boo Productions, Verve Pictures, Avalon, Karma Films, Kino.
Protagonizan: Christos Stergioglou, Michelle Valley, Aggeliki Papoulia, Mary Tsoni, Christos Passalis, Anna Kalaitzidou.




"Kynodontas", "Dogtooth" o "Canino" es una película de 2009 del director griego Yorgos Lanthimos. Ya había visto y recomendado hace poco otra película del mismo director: "La Langosta". Aún me queda ver dos películas más del mismo director, que tanto el público como la crítica especializada han dado el dedo hacia arriba a ambos films (El Sacrificio del Ciervo Sagrado y La Favorita).
Como La Langosta me gustó bastante, y como confío en el criterio de mis dos amigos conocedores del séptimo arte, no dudé en darle play a esta película, que además me llamaba mucho la atención el hecho de que está íntegramente hablada en griego.


Siendo sincero, esta película me resultó bastante deprimente, y personalmente no me gustó demasiado, pero tengo que reconocer que el mensaje es interesante y está bueno poner al público a reflexionar sobre estas temáticas. La película relata la vida de una familia que vive engañada y controlada por el padre, en complicidad con su esposa, a base de mentiras y miedo.


A pesar de que sus tres hijos (un hijo y dos hijas) ya son personas grandes, adultas, este matrimonio se ha esmerado tanto en tenerlos controlados al extremo y completamente apartados de todo lo que ocurre afuera de su casa, que han conseguido que estas tres personas sean tan ingenuas e ignorantes como niños pequeños, quienes confían ciegamente en todos los engaños y mentiras que sus padres les "enseñan" día a día. 


 Esta película es muy explícita en todo sentido, desde lo escatológico y lo sexual, hasta lo sangriento. Y aunque es difícil de ver, en realidad no es una película densa o aburrida. Tiene un ritmo que si bien parece lento, y casi no tiene acción (por no decir que directamente no tiene nada de acción), tampoco es pesado o cansador, ya que (al menos en mi caso) mantiene a los espectadores con la expectativa de qué locura nueva ocurrirá a continuación. El factor sorpresa, esa incertidumbre, es lo que hace que no aburra aunque no tenga más acción que las desafortunadas andanzas de esta particular familia dentro de su propia casa.


Otra cosa que vi bastante cruda también, aparte de ciertas escenas que son crudas en su contenido, es la estética. Con cámara fija, una iluminación que imita la natural y sin pretensiones con respecto a la fotografía o a tomas artísticamente complejas, más allá de alguna que otra dentro de la piscina, abajo del agua, con los personajes nadando, yo pondría a esta película en alguna categoría cercana al "realismo sucio". Realmente no he visto demasiadas películas de este estilo como para saber en qué categoría encajonarla, pero sus metáforas no se ven tan representadas por el lado visual o escenográfico, si no que está directamente en sus diálogos. Esto me resultó peculiar, siendo que antes había visto La Langosta, una película del mismo director que sí juega mucho con lo audiovisual y con situaciones y acciones de los personajes de forma muy metafórica


Quizás, justamente lo triste y lo deprimente de este film es eso, lo realista. Que todo lo que ves es lo que pasa, que todo está ahí, a la vista, y que lo metafórico sale de la boca de los mismos personajes, jugando con las posiciones de poder y sumisión de los protagonistas. Que cada cosa que se ve en la película realmente está ocurriendo en la historia, y no es un sueño, una pesadilla, una visión o alucinación. Saber que la metáfora radica en extrapolar una situación perturbadoramente realista a la realidad misma de la sociedad, eso es lo que hace ruido en la cabeza del espectador. 


Vuelvo a advertir que se trata de una película tremendamente deprimente y desesperanzadora, pero refleja una realidad espantosa de la sociedad humana. Puede reconocerse también como una moraleja acerca de las libertades de las personas y cómo con mentiras y miedo se puede gobernar a toda una comunidad. Posiblemente es una advertencia que nos hace el director sobre los gobiernos que se dedican a estupidizar a la población, hasta que estos son tan ignorantes que son fácilmente manipulables y controlables


Una muestra de cómo no es necesario crear maquetas y escenarios de futuros apocalípticos de ciencia ficción para mostrar una realidad distópica. Alcanza con encontrar una casa aparente común con una familia adentro para encontrar una de las distopías más retorcidas y enfermizas. Y, como en toda historia distópica, también hay una figura que representa el despertar y la rebeldía contra el sistema gobernante, totalitario y opresor. 

Sé que es contradictorio, pero aunque no la disfruté, la recomiendo. Y dejo por acá el trailer, para que tengas una pequeña probadita de la gran locura que es esta obra del séptimo arte griego.


¿Conocías al director? ¿Viste esta película? ¿Te gustó? Me gustaría leer comentarios al respecto, por el momento me despido ¡Hasta luego!



The Great Piccolo.

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